Esta semana nos damos un paseo por las instalaciones del Club Náutico de Altea para tomar nota de los ingenios que los marineros utilizan para evitar que los excrementos de las gaviotas deterioren sus embarcaciones.

Las gaviotas son parte fundamental del paisaje marítimo, y por tanto, la convivencia con estas aves forma parte del día a día en los puertos. Una de las preocupaciones de los usuarios es evitar que se posen en su barco. Las embarcaciones son parte de su entorno y de sus áreas de reposo, accediendo siempre a ellas por sus partes más altas. Sus excrementos en toldos, lonas y cubierta son el molesto recuerdo de su visita. En este breve artículo hemos hecho una recopilación de los artefactos que los usuarios del Club Náutico de Altea han ingeniado para poder evitar el deterioro de sus embarcaciones. Arriba puedes ver algunas fotos ilustrativas.

Colocar unas bridas de plástico en las barandillas de proa parece ser la más utilizada por los cruceros. Esta solución evita que las gaviotas se posen, las bridas dirigidas hacia el cielo entorpecen el movimiento de las alas y no permiten que el ave aterrice. También podemos ver como algunos utilizan cds suspendidos por hilo de pescador y buhos o cuervos de plástico colgados del mástil para espantarlas. En los toldos de las embarcaciones más pequeñas muchos usuarios han optado por colocar hilos de pescador que van de lado a lado del toldo para tener un entramado que evite que ninguna gaviota se pose. Estas son algunas de las opciones que cualquier usuario puede utilizar con coste cero y un poco de ingenio.