Los nuevos códigos diseñados por la empresa NaviLens permiten ubicarse en las instalaciones del Club Náutico de Altea a las personas con discapacidad visual.
Los códigos QR se han convertido en una herramienta de uso diario que están cada vez más presentes en los espacios públicos. Sin embargo, este tipo de etiquetas son difíciles de identificar para las personas que tienen algún tipo de discapacidad visual y necesitan un sistema adaptado. Este fue el motivo que impulsó la creación de los códigos de colores NaviLens.
Para identificar un código NaviLens no es necesario acercar el móvil a pocos centímetros de la etiqueta (se puede leer desde varios metros de distancia) ni enfocarla con la cámara, algo imprescindible para las personas con discapacidad visual. Además, el móvil puede leer las etiquetas mientras el usuario está en movimiento y sin importar las condiciones lumínicas del espacio.
Los usuarios sólo necesitarán tener instalada la APP de Navilens para poder leer los códigos. Deberán mover el móvil alrededor del entorno hasta escuchar un sonido de “click” que indicará que se ha detectado un código NaviLens, entonces la aplicación comenzará una locución con una explicación en audio.
El Club Naútico de Altea ha colocado en diferentes puntos de sus instalaciones estos códigos con el fin de permitir que las personas con discapacidad visual que visiten por primera vez su puerto puedan ubicarse. Los códigos contienen información sobre la ubicación de cada área (oficinas de recepción, área deportiva, varadero, restaurante) y como es su acceso, además de alguna información relevante sobre los servicios que ofrece el CN Altea.
Se trata de una medida que la entidad alteana ha puesto en marcha para mejorar la calidad de su servicio y lo ha presentado como mejora para este 2024 en la renovación de su distinción SICTED (Sistema Integral de Calidad Turística en Destinos).